¿Por qué tenemos derrames oculares?

Puede ser que alguna  vez hayamos  tenido un derrame en un ojo y que haya desaparecido sin más al cabo de unos días. No obstante, hay personas que los padecen de manera frecuente, lo cual les preocupa, ya que no saben la causa y les hacen sentirse observados.

En este artículo te explicamos por qué algunas personas sufren derrames en los ojos de manera habitual y cómo los pueden prevenir de manera natural.

Los derrames y el corazón

Los derrames oculares pueden tener relación con el corazón, en especial si casi siempre suceden en el ojo izquierdo.

No es una cuestión grave, pero sí que debemos tener en cuenta que está reflejando un sobresfuerzo que el corazón ha tenido que hacer ante una situación difícil. Puede ser por un enfado, un ejercicio brusco, etc.

Por este motivo, cada vez que nos suceda, debemos retroceder a las horas e incluso días anteriores y preguntarnos qué es lo que nos ha sucedido.

No siempre habremos reaccionado ante esa situación ya que, en muchos casos, los derrames son fruto de un golpe fuerte que hemos reprimido y, por lo tanto, nos ha afectado de manera interna.

Muchas veces, quienes sufren los derrames son personas muy serenas y pacíficas en apariencia, que sufren en silencio las situaciones difíciles.

Sobre el corazón

El corazón es un órgano vital que, como el resto del cuerpo, también alberga emociones y sufrimientos.

Según la medicina tradicional china, las horas de máximo trabajo para regenerar su función son desde las 11 de la mañana a la 1 del mediodía, una franja horaria en la que, si tenemos predisposición a sufrir problemas cardiacos, no deberíamos realizar grandes esfuerzos.

Además, aunque suene como algo simbólico, el corazón también está relacionado con el amor y las relaciones de pareja y familia, por lo que también recibe el impacto de todos los traumas que vivimos en este ámbito, desde el fallecimiento de un familiar a una ruptura amorosa.

Prevención del derrame

Así, si queremos prevenir los derrames oculares deberemos cuidar la función cardiaca. Estos remedios los podemos aplicar siempre y cuando no padezcamos una enfermedad del corazón o estemos ya bajo tratamiento médico, en cuyo caso deberíamos siempre consultarlo primero.

A continuación damos algunos consejos para la salud del corazón:

• Dormiremos siempre boca arriba o sobre el lado derecho, pero evitaremos dormir sobre el lado izquierdo, ya que es una postura que comprime el corazón.
• Nuestra alimentación debería ser, lo máximo posible, vegetariana, que son los alimentos más beneficiosos para el corazón. En cambio, los más perjudiciales son la carne roja, el embutido, las grasas saturadas, la sal refinada, las bebidas gaseosas, etc.
• Evitaremos todo tipo de malos hábitos estimulantes, como el tabaco, el alcohol, etc.
• Tendremos en cuenta la influencia de las emociones negativas como el odio en la salud cardiaca. Podemos ayudarnos de terapias como la homeopatía o las flores de Bach.
• Son muy saludables las duchas de agua fría. Si nos cuesta porque estamos acostumbrados al agua caliente, podemos alternar agua fría con caliente y, de manera gradual, hacer predominar cada vez más la fría.

Haremos un recorrido en el cual la zona del corazón quedará en último lugar. Empezaremos por el pie y la pierna derecha, de delante a atrás, y haremos lo mismo con la izquierda; pasaremos al costado y el brazo derecho y, a continuación, el izquierdo.

Cura de espino blanco 

Si sospechamos que podríamos estar a punto de sufrir un derrame ocular porque ya conocemos la sensación previa o porque hemos vivido una situación habitual que nos lo suele provocar, o bien cuando ya lo tenemos, podemos realizar una cura de cinco días con espino blanco.

Esta planta medicinal tiene propiedades vasodilatadoras de las arterias coronarias, ayuda a que el corazón bombee la sangre con más fuerza y relaja nuestro sistema nervioso ante situaciones de estrés, entre muchas otras.

Sus virtudes para la salud coronaria se conocen y usan desde la antigüedad. Además, mejora en general la circulación del organismo, lo cual va a prevenir y tratar los derrames.

Durante el derrame también podemos lavarnos la cara con agua fría, siempre con los ojos cerrados, varias veces a lo largo del día. Con este sencillo consejo aliviaremos la vista y el corazón.

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